Dentro de Talent Land 2019 está el espacio de Iron Land, donde hay auditorio lleno y se percibe un aire de expectativa. Se presentaba uno de los Rockstar de los ingenieros, quién los ha guiado en aquellos difíciles momentos cuando el Led no enciende y no se sabe cuál cable cambiar. Hablamos de Profe García con la conferencia «De Ingeniero a Youtuber» quién llevó al público a través de su vida mediante anécdotas divertidas y memorables.
Le regalaron dos carritos eléctricos cuando era niño; el primero se convirtió en avión pero nunca voló, al segundo lo transformó en barco, que se quemó luego de dejarlo un buen rato en el agua.
Originalmente quería estudiar Agronomía pero se ganó una beca para estudiar Ingeniería eléctrica, no sabía a qué iba pero le prometieron que armaría máquinas de Pac-man y se quedó.
Cuando se tituló, Eric entró a trabajar a una compañía telefónica donde se encontró con uno de los mayores retos de un ingeniero: el letrero de Error. Después del pánico, el problema se resolvió en unos minutos, pero notó algunas cosas: El jefe y el supervisor no estaban para darle instrucciones, el intendente era en realidad un ingeniero que mataba el tiempo en la puerta para jubilarse y los retos ahí no eran lo que esperaba. Cuando habló con su jefe sobre la posibilidad de hacer innovaciones o mejorar procesos le dijo: «Ahí, quietico, hasta que cumpla 67 años y se pueda pensionar». Esa fue la señal.

La carrera de Eric continuó en el área de la telefonía pero ahora móvil, que era la novedad en los años noventa. Soñaba con viajar por el mundo y empezó pasando tres años en las montañas de Colombia montando “un helicóptero”. Ese era uno de los apodos del burro que usaban para transportarse entre los pueblos. Después de las aventuras en la sierra se casó con una ex-compañera universitaria quien antes fue su asesora de inglés para mantener la beca.
Nuevamente fue contratado por una compañía telefónica pero esta vez en Estados Unidos, Eric es muy listo en español pero en inglés le costaba demostrarlo. Y aquí viene una de mis partes favoritas.
En la primer entrevista fingió por 10 minutos leer un manual en inglés y al final pudo explicar todo perfectamente. No sucedió por gracia divina, fue porque estando en la sierra cada noche leía los manuales y los cálculos que hacían sus compañeros franceses. Fue a constancia y no la suerte. Acreditó con mención honorífica su capacitación en EU, pese a no hablar inglés pero nuevamente gracias a que, en sus palabras, «estudió como un loco».
Trabajó en Brasil, donde las llamadas para soporte técnico eran demasiado costosas por lo que empezó a hacer videos en el recién salido YouTube, su material de apoyo llegó incluso hasta ingenieros africanos.
El canal tuvo que cerrar por petición de la compañía. Después de varios emprendimientos no tan exitosos en Estados Unidos y en su país, empezó a dar clases. Ahí se dio cuenta de que los alumnos necesitaban un empujón extra fuera del aula. Principalmente en la escuela nocturna donde muchos estudiantes llegaban tarde de sus trabajos y se perdían media clase. Así, El Profe García que en su momento aprendió del famoso Julio Profe se lanzó como Youtuber.
Al Profe García le gusta viajar, armar y desarmar cosas y sobre todo compartir su pasión por la electrónica y la robótica. Laboralmente vivió muchas subidas y bajadas pero no desistió en su camino, aprendió del esfuerzo y creó un espacio donde puede hacer cosas que ama y hacerlas parte de su empleo.
Actualmente vende y crea dispositivos electrónicos, su canal tiene el mayor número de suscriptores de Latinoamérica y número tres a nivel mundial. Y muy importante, ya no viaja en burro para llegar a su trabajo.
Después de todo, se siente satisfecho de no haberse quedado quieto cuando se lo aconsejaron.