Sabemos ya que en el cerebro recae todo lo que puede ser una persona, desde sus comportamientos biológicos hasta aquellos psicológicos. Hemos aprendido un poco de cómo funciona y qué áreas del cerebro controlan tales partes de nuestro ser. Pero, ¿qué pasa si se posee sólo medio cerebro?
La hemisferectomía consiste en extirpar o inhabilitar una región del cerebro que abarca la mitad o un hemisferio. Es practicada para sanar a pacientes con epilepsia, donde se extrae ya sea la mitad completa o cortando las partes que conectan con el hemisferio funcional. Las personas a las que se les practica esta cirugía quedan afectadas con algún nivel de hemiplejia, o reducción de su percepción visual.
Entre otras cuestiones, los científicos del Instituto Tecnológico de California (Caltech) se han propuesto estudiar esta pregunta: cómo diberían las conexiones cerebrales, de una persona que ha tenido una hemisferectomía, en comparación con una persona sana mediante IMRf (Imagen por resonancia magnética funcional).

El estudio se basó en una comparativa de un grupo de seis individuos a los que se les practicó la hemisferectomía durante su infancia, junto a otro grupo de control de seis personas sanas. A través de distintas pruebas se fue observando como las distintas redes funcionales fueron presentando una conectividad más alta que el grupo de control (las seis personas sanas).
De hecho presentaron una conectividad anormalmente alta en distintas redes cerebrales. Notoriamente pronunciadas en las somato-sensoriales, motoras y visuales. Los resultados de estas pruebas se fueron comparando con los datos de la base Genomics Superstructure Project (GSP).

Señalan además que los resultados del estudio reflejan el incremento adaptativo ante la necesidad de cubrir todas las funciones debido a la pérdida de la disponibilidad de una estructura cerebral que pueda soportar la organización funcional.
El estudio es considerado como el primero en el campo que estudia las redes cerebrales mediante el IMRf. Además debido a la cantidad de muestras (seis individuos) no es muy notable el estudio, por lo que sería necesario una futura prueba que pudiera corroborar y hacer más representativo este tipo de estudios. Señalan también, como tema de un futuro estudio, a la reconfiguración exacta de los mecanismos en respuesta a la demanda de tareas.
No se le resta tampoco la importancia que ya tiene por haber podido comenzar una nueva investigación en el campo de la neurociencia que puede ayudar a aclarar la idea de que el cerebro está dividido en secciones distintas unas de otras y que se necesite ambas para poder tener una buena coordinación con el cuerpo.
«El trabajo, con sus limitaciones, tiene interés en la línea de romper con la idea clásica de que distintas regiones del cerebro tienen funciones concretas. No tiene mucho sentido buscar la región del lenguaje, de la ira o la inteligencia. Cada vez más estudios nos enseñan que el cerebro es un conjunto que puede funcionar de muchas maneras”.
Sandra Jurado, investigadora del Instituto de Neurociencias de Alicante (UMH-CSIC)
Imágenes extraídas del artículo original.
Un comentario en “Mejores conexiones cerebrales en personas con hemisferectomía”