Pasión por la nanotecnología: Richard Feynman

¿Que es la pasión? A la pasión, se le conoce como el gusto extremo que desarrolla una persona por algo, ya sea un objeto o afición, por ejemplo un automóvil, derivando de este gusto extremo, la pasión por el automovilismo; o en su defecto, dígase afición a la música, las artes o siendo más precisos la ciencia y subsecuentemente tomar el estudio de esta, como una pasión. 

¿Cuáles son las consecuencias de experimentar la pasión por la ciencia?

Esta pasión, deseo o gusto inmenso por las cosas nos ha dado la evidencia de, que personas extraordinarias se encuentran en cualquier lugar, podemos mencionar muchos ejemplos de personas apasionadas a quienes por momentos se les nubló la razón como resultado de  mantenerse en la búsqueda de cosas extraordinarias, dando como fruto, la realización de grandes aportes a la humanidad.

Richard Feynman, fue uno de estos personajes apasionados por la física y las matemáticas, lo cual, lo llevaría a ganar el Premio Nobel junto a Julian Schwinger y Sin-Itiro Tomonaga en 1965, por sus aportaciones al desarrollo de la electrodinámica cuántica.

Hablemos de nanotecnología

La carrera del profesor Feynman fue sin duda muy fructífera ya que más aportaciónes precedieron a las ya mencionadas además de sus aportes al campo de la electrodinámica cuántica y la creación de los diagramas que llevan su nombre por título, también sentó las bases de lo que hoy conocemos como nanotecnología

Pero… ¿De qué trata la nanotecnología? En el libro Nanociencia y nanotecnología de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología, se define a esta materia como:

La fabricación  de materiales, estructuras,  dispositivos y sistemas funcionales  a través del control y ensamblado de la  materia a la escala del nanómetro (de 0.1  a 100 nanómetros, del átomo hasta por debajo  de la célula), así como la aplicación de nuevos  conceptos y propiedades (físicas, químicas, biológicas,  mecánicas, eléctricas.) que surgen como consecuencia de  esa escala tan reducida.

Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología

Sin embargo esta definición abarca de manera muy ambigua de lo que trata dicha materia. El término fue utilizado primeramente en 1974 por el profesor N. Taniguchi de la  Universidad de Ciencia de Tokio en un artículo titulado «On the Basic Concept of  ‘Nanotechnology’», en dicho trabajo se habla de la nanotecnología como el próximo descubrimiento tecnológico, que nos daría la oportunidad de separar, consolidar y deformar materiales, átomo a átomo o molécula a molécula.

Ya se había tocado el tema previamente y es que varios años antes de recibir el Premio Nobel, Richard Feynman pronunció un discurso que cambiaría la forma en la que se veían las cosas, en aquel entonces, por el año de 1959 en el Instituto de Tecnología de California, en Pasadena, titulado «Hay mucho espacio al fondo» («There is plenty of room at the bottom»), donde se sentaron los pilares de lo que más tarde todos conoceríamos como nanotecnología.

Un nuevo mundo de posibilidades se abrió en ese momento y es que en dicha conferencia habló sobre cómo controlar, manipular y fabricar objetos de dimensiones muy pequeñas

En  el año  2000, cuando se mire hacia atrás, todo el mundo se preguntará por qué hasta el año 1960 nadie empezó a  moverse seriamente en esta dirección.

Richard Feynman

cuestionaba así mismo y reflexionaba sobre el futuro y la dirección hacia donde quería  llevar su ciencia y la posibilidad de crear nanotecnología basada en la manipulación de átomos. 

No me asusta considerar la pregunta final  de si, próximamente, en el futuro, podremos  colocar los átomos como queramos: ¡los verdaderos  átomos, aquellos que están al fondo! Y ¿cuáles serían  las propiedades de los materiales si pudiéramos verdaderamente colocarlos como quisiéramos? No puedo saber exactamente qué  pasaría, pero no tengo la menor duda de que si llegaramos a controlar la colocación de objetos a una pequeña escala,  tendríamos acceso a un amplio rango de propiedades que los materiales pueden presentar y podríamos hacer una gran cantidad  de cosas.

Richard Feynman

Si bien, Feynman fue el primero en tocar el tema y hablar sobre nanotecnología en 1959, no fue sino hasta 1986 que sus ideas se concretaron. Ese mismo año, E. Drexler publicaría su libro «Engines of creation» en el cual describe cómo las nanomáquinas serán capaces de ensamblar desde computadoras hasta maquinaria pesada.

Desde que Feynman y Drexler sentarán las bases de la nanotecnología, ha habido un fuerte desarrollo experimental en los laboratorios, así poco a poco se van descubriendo los límites entre lo posible y lo imposible dentro de esta nueva ciencia, logrando cada vez más hallazgo dentro de la materia que en un futuro no muy lejano será capaz de probar los límites entre la ciencia y la ficción.

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